martes, 1 de agosto de 2023

COMER SANO

Comer sano es la base para tener un excelente estado de salud, por tal motivo, la Secretaría de Salud desde hace algún tiempo se ha encargado de poner etiquetas a los alimentos que tienen excesos de calorías, grasas y sal a fin de alertar a los consumidores del riesgo que existe en el consumo de estos productos, pero ¿en realidad los consumidores tienen conciencia de esto?

Definitivo es que aún falta mucha información e inversión en educación de la salud, pues si no existe el conocimiento, los consumidores de los productos no podrán entender a la perfección la utilidad de estos sellos.

Así mismo, la creencia de que los productos light es lo mejor para la salud en un concepto no del todo verdadero que condiciona que existan errores en los hábitos alimenticios.

En la obesidad y enfermedades crónico degenerativas, la alimentación es la base piramidal en el control de las mismas, de manera tal que el desconocimiento en materia de alimentación, es un arma en contra en la atención de estas patologías.

Les explico.

En la actualidad, los pacientes diabéticos piensan que pueden consumir bebidas embotelladas libres de azúcar de forma indiscriminada, pues al ser libres o bajas en azúcar, no contienen calorías que eleven sus niveles de glucosa. Y en cierta forma, esto es correcto, sin embargo, no se tiene en cuenta que, durante el avance de la diabetes, ésta condiciona que se afecten otros órganos del cuerpo, tal como sucede a los riñones, los cuales al paso del tiempo comienzan a sufrir un deterioro en su función, disminuyendo la capacidad que tienen para filtrar de la sangre aquellas toxinas que hacen daño, surgiendo así un padecimiento secundario a la diabetes, que en su inicio se llama Nefropatía Diabética, pero que al ir avanzado gradualmente se convierte en Insuficiencia Renal Crónica, condición de salud que se caracteriza por la pérdida de la capacidad de filtración de los riñones.

Esta enfermedad causada inicialmente por la Diabetes, es favorecida en su complicación y avance gradual por el consumo de sodio en exceso (el sodio es el componente principal de la sal), de manera tal, que el consumo de refrescos sin azúcar favorece esta patología debido a que las bebidas dulces libres de azúcar, amargas (como la cerveza) y sin sabor (como el agua mineral) tienen un alto contenido de sodio, por lo que causan más daño en la salud de lo que se puede creer.

Mención aparte merecen las bebidas alcohólicas, las cuales contienen azúcares y sodio como parte de sus componentes, por lo que consumidas en grandes cantidades, son causantes de descontroles metabólicos en los pacientes diabéticos e hipertensos. Y dependiendo de la zona geográfica, la mayoría de estas bebidas van acompañadas de una botana, tapa, pasapalo, pasaboca, picada, picadera, picoteo, picadillo, piqueo, boquita, bocadito, pincho, enjuto, aperitivo, aperital, antojito, copetín, canapé o piscolabis que por lo general tienen un alto contenido calórico, grasas insaturadas y sodio.

Y si en las personas que padecen diabetes el consumo de refrescos sin azúcar es dañino para la salud renal, peor aun lo es cuando se padece Hipertensión Arterial Sistémica, ya que en esta enfermedad se debe evitar o disminuir el consumo de sal como parte del tratamiento farmacológico.

La sal, no sólo la encontramos en el salero o los refrescos embotellados, sino también en alimentos como los quesos amarillos, los embutidos (chorizo, longaniza, salchichas, pepperoni, jamones cocidos, carne y pastel de carne enlatada, por mencionar algunos), mismos que tienen un alto porcentaje de sodio, componente principal de la sal. Aunado a ello, dichos alimentos tienen un gran contenido en grasa de origen animal, por lo que al consumirlos se incrementa el riesgo de complicaciones en las enfermedades ya citadas.

Vayamos a otro ejemplo más sano. La leche light, se llama así porque es baja en grasas de origen animal, pero, aunque en menor proporción (dependiendo de la marca) contiene calorías, de manera tal que su consumo en exceso, provoca aumento de peso y, en consecuencia, descontrol en la enfermedades crónico degenerativas.

Para comer sano es necesario tener conocimiento sobre los alimentos y sus aportes calóricos, pues incluso se puede ser vegetariano o vegano y tener sobrepeso u obesidad.

Pongo como ejemplo lo siguiente ¿Qué comen las vacas? ¿Has visto a una vaca comer hamburguesas, pizza, alimentos fritos u otro tipo de comida chatarra? Por lo regular las vacas solo comen pasto, heno, zacate, hierba. Entonces, si sólo comen lo anterior ¿Por qué están gordas? La respuesta es porque se la pasan comiendo todo el tiempo grandes cantidades de estos alimentos, lo cual nos indica que el alimento puede ser sano, pero si no se come en cantidades correctas, con los requerimientos calóricos necesarios, se pude caer en sobrepeso u obesidad.

Las personas, en su afán de lograr reducir de peso, acuden a medidas nutricionales alternativas como los productos milagro que ofrecen bajar de peso, mismos que son verdaderas quimeras que cuestan más de lo que resultan. Pero independientemente de que funcionen o no, lo más delicado es el daño que provocan al cuerpo, específicamente al hígado. Estudios científicos han demostrado que estos suplementos alimenticios tienen más riesgos que beneficios. Marcas comerciales como el Omnilife, Herbalife, Amway o Immunocal, productos naturales como el noni, moringa, cimifuga rasemosa, nim, efedra sínica (Ma Huang), camelia sinensi (Té verde), kava, palma enana americana (hipertrofia prostática), escutelaria, sen, han sido motivo de investigaciones que han comprobado el daño que producen al hígado. Para prueba, basta poner en un buscador de internet la palabra HEPATOTOXICIDAD y el nombre de algunos de estos productos y podrán tener acceso a muchos estudios y artículos científicos que avalan lo que aquí se informa.

En conclusión, en la población en general existe una gran necesidad de una correcta alimentación, ya sea para mantener un estilo de vida saludable, o bien, para evitar la complicación de alguna enfermedad crónico degenerativa, por lo que recomiendo visitar a un profesional en materia de salud o nutrición a fin de recibir información precisa y apropiada a su condición de salud.

Cabe destacar que se debe comer para vivir y no vivir para comer, pero es necesario comer bien para vivir mucho.

 

Dr. Carlos P. Baquedano Villegas

Especialista en Medicina Familiar

 

Cancún, Quintana Roo, México a 01 de agosto del 2023

 

EDITORIALES ANTERIORES

RISOTERAPIA

¿Fiesta próxima? CARUDA Canta y Baila te pone la música